Insubordinación
Imagen Pixabay
–Dime, mariquilla, ¿verdad que ya ha florecido el castaño? –pregunta Pablo arracimado a su tronco.
–¿Y cómo lo ha sabido el niño de mi corazón? –se sorprende ella.
–Por las abejas. ¿No oyes el zumbido? Van a por su néctar como yo a por tus dones preciosos –blasona.
Sentose el joven después en la yerba con la cabeza sobre el regazo de la Nela.
–Nadie me concede las virtudes de tu imaginación –replica ella, enredando una guedeja en los dedos.
–«La humanidad está sujeta a mil errores». Eres mi lazarillo y mi esperanza. ¿Cómo podría yo vagar por la hermosura de estas tierras sin tu mirada?
Vastas praderas salpicadas de reses y caseríos dormían bajo el horizonte, abrazadas por cerros atestados de minas.
–Atiende, mi ángel –reclama la muchacha colocando la mano del ciego en su vientre.
–¡Se ha movido! –exclama jubiloso.
–Este hijo que nos manda la virgencita es un potranco asilvestrado como yo.
–Bienvenido sea, hembra o varón, malandrín o cándido. Igual seré feliz –arguye él.
–¿Estará enojado don Benito por haber descompuesto la tragedia? –pregunta de pronto la muchacha.
–«Si me dan a escoger entre no ver y perderte, prefiero no ver…» Él bendijo mi albedrío. No se ha de, pues, indisponer –esgrime azogado por las pataditas en su oído.
–¿Y si se presenta –cuestiona ella– por insubordinados?
–No se apure la luz de mis ojos –aquieta–. Anda don Benito enfrascado con Fortunata y Jacinta y, a buen seguro, conturbado con los amores de doña Emilia.
Homenaje a Marianela, Benito Pérez Galdós
Este texto responde al microrreto: Fan Fiction, impulsado por El Tintero de Oro, consistente en escribir un relato de 250 palabras protagonizado por un personaje de ficción. Puede que no sea mi personaje favorito, pero desde luego Marianela, que leí siendo casi todavía una niña, me animó a adentrarme en la literatura con renovado y ferviente interés.
Vayan mis disculpas al señor Benito Pérez Galdós por llevar a sus personajes a la disidencia. El final de su puño y letra es inmejorable, (no voy a desvelarlo no vaya a ser que alguien se anime a leerla) pero una vez entregada al reto me ha parecido divertido ofrecer esta alternativa.
Pido disculpas porque el léxico y por supuesto la narrativa no se acomoda al estilo galdosiano. Me he acercado a él con respeto, humildad y admiración.
Las dos frases entrecomilladas son literales de la obra original.
Gracias David Rubio por esta invitación que me ha hecho recordar las sensaciones que en su día me produjo esta novela, y por este interesante y didáctico ejercicio.
Imagen Pixabay
–Dime, mariquilla, ¿verdad que ya ha florecido el castaño? –pregunta Pablo arracimado a su tronco.
–¿Y cómo lo ha sabido el niño de mi corazón? –se sorprende ella.
–Por las abejas. ¿No oyes el zumbido? Van a por su néctar como yo a por tus dones preciosos –blasona.
Sentose el joven después en la yerba con la cabeza sobre el regazo de la Nela.
–Nadie me concede las virtudes de tu imaginación –replica ella, enredando una guedeja en los dedos.
–«La humanidad está sujeta a mil errores». Eres mi lazarillo y mi esperanza. ¿Cómo podría yo vagar por la hermosura de estas tierras sin tu mirada?
Vastas praderas salpicadas de reses y caseríos dormían bajo el horizonte, abrazadas por cerros atestados de minas.
–Atiende, mi ángel –reclama la muchacha colocando la mano del ciego en su vientre.
–¡Se ha movido! –exclama jubiloso.
–Este hijo que nos manda la virgencita es un potranco asilvestrado como yo.
–Bienvenido sea, hembra o varón, malandrín o cándido. Igual seré feliz –arguye él.
–¿Estará enojado don Benito por haber descompuesto la tragedia? –pregunta de pronto la muchacha.
–«Si me dan a escoger entre no ver y perderte, prefiero no ver…» Él bendijo mi albedrío. No se ha de, pues, indisponer –esgrime azogado por las pataditas en su oído.
–¿Y si se presenta –cuestiona ella– por insubordinados?
–No se apure la luz de mis ojos –aquieta–. Anda don Benito enfrascado con Fortunata y Jacinta y, a buen seguro, conturbado con los amores de doña Emilia.
Homenaje a Marianela, Benito Pérez Galdós
Este texto responde al microrreto: Fan Fiction, impulsado por El Tintero de Oro, consistente en escribir un relato de 250 palabras protagonizado por un personaje de ficción. Puede que no sea mi personaje favorito, pero desde luego Marianela, que leí siendo casi todavía una niña, me animó a adentrarme en la literatura con renovado y ferviente interés.
Vayan mis disculpas al señor Benito Pérez Galdós por llevar a sus personajes a la disidencia. El final de su puño y letra es inmejorable, (no voy a desvelarlo no vaya a ser que alguien se anime a leerla) pero una vez entregada al reto me ha parecido divertido ofrecer esta alternativa.
Pido disculpas porque el léxico y por supuesto la narrativa no se acomoda al estilo galdosiano. Me he acercado a él con respeto, humildad y admiración.
Las dos frases entrecomilladas son literales de la obra original.
Gracias David Rubio por esta invitación que me ha hecho recordar las sensaciones que en su día me produjo esta novela, y por este interesante y didáctico ejercicio.
Buenos días, Matilde. Aunque no he leído la novela , reconozco cuando algo está escrito con gusto y, este micro, rezuma buen gusto por todos sus poros. Buena semana. Un abrazo.
Muchas gracias, Pedro
Es una novela que tiene mucha miga. Tras la historia entre ambos personajes (yo solo he captado la parte digamos «romántica») hay toda una crítica al clasismo de aquella España del s. XIX, que en la pluma del maestro Galdós queda retratada con una elegancia soberbia. De alguna manera me tocó la fibra cuando era poco más que una chavalita. Le tengo muy presente.
Muchas gracias por pasarte.
Un abrazo
Hola, Matilde, te ha quedado un relato delicioso, la verdad es que no tengo más referencias que lo poquísimo que recuerdo de la serie que rtve. realizo sobre la novela. En cualquier caso ha sido un placer leerte.
Un abrazo.
Hola, Ángel,
Menuda «fanática» estoy hecha que no tenía ni idea de que había una serie de TV sobre este personaje. Película sé que se hizo, pero de series televisivas no tenía ni idea.
Gracias por pasarte.
Un abrazo
Matilde, perdona, tienes toda la razón, me he obcecado al leer los nombres de Fortunata y Jacinta, de esa novela si hay una serie, de Marianela se hicieron en distintas épocas dos o tres películas.
Matilde, una maravilla de relato, y en el que se respira la influencia y el estilo narrativo de Don Benito. Lo has narrado muy bien. No puedo más que decirte que enhorabuena!
Muchas gracias Mayte.
Ya me gustaría a mí acercarme siquiera un poquito al estilo narrativo del maestro, pero el ejercicio, sin duda, ha sido muy interesante.
Gracias por pasarte.
Un abrazo
Conozco la novela. Y te felicito por este final.
Hicieron muy bien los personajes en rebelarse.
Un abrazo.
Hola Demiurgo
Bueno, optar por ese final alternativo era lo más previsible, claro que le dejo al pobre Pablo sin vista…pero en fin, todo no podía ser
Muchas gracias por pasarte.
Pues otras novelas sí, pero esta no, además de los episodios nacionales que alguno ha caído. Muy buen relato. Creo que el ambiente algo bucólico está muy conseguido. La caracterización de los protagonistas a través de los diálogos es muy buena. Muy buen micro en el que expones la rebelión de los personajes ante su creador, el cual debe estar en otros menesteres que le tienen bien ocupado. Revolucionaria. Me ha gustado el micro, Galdós no disentiría.
Un abrazo
Hola Carles,
Sí, creo que no es de las novelas más célebres del maestro Galdós, al menos, comparada con todas las demás.
Gracias por tu valoración
Hola, Matilde. Qué lindo relato! No he leído el libro, pero si es como presentas el ambiente y los personajes debe ser delicioso.
Muy buen trabajo!
Un abrazo
Hola Mirna,
Marianela es una deliciosa novela, fácil de leer y que cuenta mucho más al margen de la historia de la pareja. No he querido desvelar el final (que uno puedo imaginar en parte, pero no del todo) por si alguien se decide a su lectura, pero el maestro le atiza bien a algunos aspectos de aquella España, utilizando la ironía de forma magistral.
Muchas gracias por pasar a comentar.
Un abrazo
¡Ay, Matilde! ¡Qué micro más precioso! Le has dado un final feliz a Marianela y has mantenido muy bien la esencia y el tono de la novela. La he releído hace no mucho y es una historia que sigue emocionando. Me ha encantado tu versión. Un beso.
Le he dado el final feliz que me hubiera gustado leer cuando era una cría. Luego comprendí que el final de Galdós, no solo el trágico, sino lo de después, lo de los periodistas y la leyenda (jo, es que no quiero desvelar tanto), en fin, que ese final es tan excepcional que es perfecto tal cual es. Pero, ciertamente, cuando leí la primera vez la novela yo deseaba el «vivieron felices y comieron perdices…» para Pablo y Marianela.
Muchísimas gracias, Marta, por tus palabras.
Un fuerte abrazo
Me encantó tu versión, Matilde. Marianela se rejuvence y emociona. Un abrazo.
Gracias Beba
Un abrazo
Precioso es poco. Has relatado un momento de ensueño, diferente, poético, original, y yo, que me encantó Marianela, he podido percibir un aire galdosiano, decimonónico, de otra época.
¡Enhorabuena! Ha sido un placer.
Un abrazo
Hola, Volarela
Me alegra saber que de alguna manera el texto te ha llevado a otro tiempo y te haya inspirado esa ensoñación.
Un placer tenerte por aquí
Saludos
Un microrrelato bellísimo Matilde, un placer leerte. Abrazos
Muchas gracias, Nuria
El libro no lo he leído, pero ,si me lo recomiendas, me lo leeré.
No me cabe ni la menor duda de que lo has versionado , como dices, con respeto, humildad y admiración. Porque conociéndote, de eso tienes en abundancia.
Te ha quedado precioso.
Marianela es un libro que recomendaría una y mil veces. A pesar de su léxico «rizado», con ese maravilloso castellano del XIX, su lectura es atrapante y muy fácil de seguir. La historia, además de contar las aventuras de Marianela como Lazarillo de Pablo (el chico ciego) también es una crítica feroz al clasismo de la época, a los convencionalismos, a la hipocresía…
Para mí fue un regalo del señor Galdós en plena adolescencia.
Así que sí, muy recomendable.
Abrazo gigante
Vaya texto bonito! Desde luego, por lo leído en los comentarios es más bonito tu final que el originL, aunque este último cumpliera una función social.
El vocabulario es apabullante, y la introducción del autor en el texto sorprendente. Todo el texto es sorprendente. Esa es la sensación que he tenido al terminar de leerlo.
Felicidades.
Abrszo
Hola Gabiliante,
Ya sabes eso de que un final feliz no siempre es el mejor final. El final de Galdós es lo que hace que la novela haya perdurado y se diferencie. Pero supongo que no es el final que te apetece leer en plena adolescencia, cuando estás con las hormonas disparadas y tenemos la vena romántica en versión «blandiblu» y a mil por hora.
Muchísimas gracias por tu valoración.
Un abrazo
Hola, Matilde. No creo que don Benito pusiera pegas en tu relato. Se nota que te escribes desde el corazón y el respeto. Muy buen trabajo.
Un saludo.
Gracias Bruno
Sin duda, personalmente me ha parecido el reto más interesante de todos en cuantos he participado en el Tintero.
Muchas gracias
Hola, Matilde, yo tampoco leí la novela, pero me has puesto en situación desde la primera frase. Se nota de dónde sacas tu maestría. Has trabajado casa parámetro hasta el milímetro para darle a la obra, aunque sea micro, el estilo perfecto.
Me encantó. Como Bruno, no creo que don Benito pusiera pegas, al contrario.
Muy buen relato.
Un abrazo!
Gracias, Pepe
He tratado de acercarme a su estilo pero, ¡madre mía! es súper difícil y más en el corsé de un micro. Pero cuando David publicó el reto lo tuve clarísimo desde el principio. Elegí a Marianela porque cuando leí la novela me encantó, me emocionó y, por si fuera poco, me animó a leer mucho más. Puede que a lo largo de mi vida otros personajes me hayan impactado más, pero Marianela es como una amiga de la infancia a la que guardo un inmenso cariño.
Un abrazo
¡Hola, Matilde! Maravilloso texto que no solo nos das un final alternativo que a buen seguro sería el que todos hubiéramos querido. Recuerdo con siendo menos que adolescente vi la película. ¡Qué manera de llorar con esa escena del final! Pero no solo te limitas a eso, sino que despliegas todo tu dominio del lenguaje para trasladarnos a otra forma de narrar, a un estilo galdosiano del que el propio autor estaría satisfecho y halagado. Micrazo!! Un abrazo!!
Gracias David,
Sí, yo también lloré, pero con el libro…
Generosísimo tu comentario, que agradezco sinceramente.
Un abrazo
Hola, Matilde. Creo que de Pérez Galdós solo he leído «Fortunata y Jacinta» y algo de los Episodios Nacionales, pero aunque no haya leído Maranela, estoy seguro de que habrás sabido ser fiel a su idea. Desde luego el estilo es impecable con ese poso elegante que te caracteriza. He disfrutado con tu relato. Un abrazo.
He tratado de ser fiel a su estilo. Su idea creo que ha saltado por los aires con mi final feliz, pero entiendo lo que quieres decir.
Muchas gracias, Isan
Vaya desde aquí mi más enfervorecido aplauso. Qué maravilla de deriva a Marianela. Don Benito seguro que estaría encantado con esta segunda versión tan bien escrita.
Enhorabuena.
Un saludo.
Pues vaya desde aquí mi más enérgico agradecimiento, Kirke.
Me alegra que hayas disfrutado su lectura y que lo manifiestes tan efusivamente.
Gracias miles
Hola, Matilde. Tu narrativa es tan educada como cuidada no creo que el autor se sintiera molesto por esta supuesta intromisión. Yo soy de mundos paralelos y finales alternativos así me parece perfecta tu visión de la historia. Saludos
Gracias,
El final de Galdós era infinitamente más original y alternativo, pero ha sido un divertido jugar a esto.
Un abrazo
Hola, Matilde. No conocía la novela, pero se oye muy interesante. Tu micro me ha gustado bastante, además expone un tema universal e intrínseco en la naturaleza humana.
Un saludo.
Gracias Cynthia