Guillermina siempre tan divina
Guillermina siempre tan divina Imagen de Lilly Cantabile en Pixabay -Señora Guillermina, cuánto tiempo que no la veíamos por Buenaserena. ¡Tiene usted muy buen aspecto! –Pregonaba aquella señora en un tono de voz exageradamente alto. -Pues sí, para qué vamos a...El pueblo tras la ventana
La calle era un hervidero de voces infantiles que Guillermina contemplaba como si la primavera acabara de llegar. Las lluvias de los últimos días había dejado una luz dorada en las aceras que ella trasladaba a los campos de su pueblo tras la ventana.
¿Por qué no te lo pones tú…?
¿Por qué no te lo pones tú…? Fotos en Pixabay Lo que se temía Luis, al final, sucedió. No sabía si a consecuencia de tantos días de confinamiento o, simplemente, porque tenía que pasar. Guillermina había amanecido mojada. Era la primera vez. Hasta ahora el Alzheimer...Lo que daría por unos huevos….
A Guillermina, octogenaria enferma de Alzheimer, le gustan los huevos, aunque a veces no se acuerda. En su encuentro con el mozo que trae la compra del súper surgen los huevos, pero no sabe por qué… solo sabe que si piensa en ellos, la boca se le hace agua. Capítulo 3 del relato: «Y de pronto, mi madre…»